Durante el transcurso desde nuestros inicios en éste arte escénico, muchas veces nos vemos obligados a cambiar de repertorio en nuestros juegos y filosofía o concepción mágica. Empezamos haciendo efectos para la familia y amigos, luego en sociedades de ilusionismo y sólo unos pocos nos atrevemos a culminar nuestras andanzas como profesionales en el mundo del espectáculo. Unos con mayor oficio y éxito y otros con menos. De todas maneras, lo que no podemos hacer es precipitarnos en las conclusiones que nos lleven por diferentes caminos. Debemos, por una cuestión de ética como amor propio, ir escalando peldaños en función de los conocimientos y experiencia adquirida ante público y contrastarlo con posterioridad. En ocasiones me he encontrado con compañeros que llevan relativamente poco en este mundo y ya están impartiendo clases a público profano, y esto último, a pesar de ser legal, no lo considero legítimo pues no te ha dado tiempo de contrastar tu experiencia con los espectadores como mínimo, hasta que llevas 10 años actuando profesionalmente.
Yo personalmente, prefiero pecar de exceso de inseguridad que hacerlo de exceso de seguridad. Hay que tener un punto de prudencia y honestidad consigo mismo, y saber cuando realmente estás preparado para actuar delante de público, asimismo como para ejercer labores docentes. Siempre hay que trabajar por debajo de tus posibilidades reales para así, darlo todo ante tus clientes y ser tu mismo a la vez. Me explico: "Si no sabes ejecutar un ENFILE correctamente, mejor haz un DOBLE LIFT. Esto te permitirá que en las actuaciones puedas estar lo suficientemente relajado como para transmitir tu personalidad al máximo y volcarte en tus primeros pasos de la presentación o narración de un efecto sin temor a equivocarte y que se vea alguna técnica. Tampoco te acomodes en hacer un DOBLE LIFT si ya has practicado y dominas el ENFILE. De todas formas es una decisión tuya y si te quieres estancar en la desidia, nadie más que tu lo va a notar. Busca siempre la SATISFACCION PERSONAL por encima de todo.
Cuando llegas a una determinada experiencia en éste campo, te darás cuenta y reflexionaras, preguntándote el porque no habías tomado determinadas decisiones anteriormente. No obstante, es mejor hacerlo así, que precipitarse al vacío de la ineptitud e ignorancia sobre lo que estás ofreciendo a los espectadores. Tanto si eres profesional como aficionado, vuelvo a repetir, debes buscar el interior de ti mismo y la SATISFACCION PERSONAL en todo momento. Esta y no otra es la razón, para que sientas el placer de actuar o hacer juegos para tus contertulios en las situaciones que te depara el destino que has elegido libremente. El hecho de ser un libre pensador te faculta para elegir el momento adecuado para avanzar y prosperar en lo que hayas estudiado. Esto no sólo es aplicable a la magia, sino a todas las facetas de tu vida. Elige bien tu repertorio de efectos y haz los que realmente asombren más a tus adeptos, también ellos te agradecerán que al verte la siguiente vez actuar, hayas cambiado algún juego de tu repertorio. Aunque eso si, existe la máxima que dice: "El mago aficionado cambia de juegos constantemente y el profesional cambia de público".
Aún a pesar de ser profesional, es bueno salir de tu zona de confort en determinadas ocasiones. Aunque sólo sea para poner a prueba tus capacidades de improvisación. Si te encasillas en determinadas secuencias de efectos durante 30 años, es posible que al final nadie venga a verte. Eres tu el que debe observar, si la afluencia de tu público va disminuyendo en cantidad y calidad. En el supuesto que disminuya en cantidad, probablemente debas cambiar algún juego de tu repertorio. Y en el supuesto que cambie de calidad es probablemente porque estas automatizando tu manera de actuar y también tienes que cambiar de actitud y repertorio. Mi opinión es que a pesar de hacer cambios, te atrevas a mejorar aspectos de tu personalidad escénica y busques también nuevo vestuario y músicas para tu espectáculo. Debes explorar todos los campos de la magia para que el público te reconozca como MAGO TOTAL.
Si llegado este momento de tu vida, ya has actuado mucho en público y empiezas a estar cansado de actuar, entonces si, te recomiendo impartir clases a público neófito para ganarte la vida e ir alternando tus actuaciones con ésta actividad que a mi me ha aportado grandes satisfacciones. Esa es mi experiencia y la expongo aquí, como alternativa profesional durante tu periodo laboral con el ilusionismo. En éste campo te encontrarás con todo tipo de personas, desde las que por curiosidad deciden iniciarse en ésta disciplina y los que realmente quieren acumular conocimientos para hacer en su círculo habitual de amistades. También, aunque sean sólo unos pocos, habrá alguno que conforme va aprendiendo de cual es la esencia de la magia, llegarán a ser profesionales cuando les hayas enseñado hasta el nivel que ellos quieran adquirir. Es muy satisfactorio, ver e ir a ver a alumnos tuyos actuar en diferentes salas y comprobar como van desarrollando y forjando sus personalidades propias.
En el momento de enseñar a tus alumnos la parte técnica, debes tener en cuenta como la asimilaste tu en su momento, puesto que si a ti te resulto fácil aprenderla, a lo mejor para tu alumno no lo es. Por el contrario, si a ti una determinada técnica te resultó difícil de asimilar, generarás más empatía a la hora de enseñarla y eso te pone en un espejo imaginario cuando enseñas a los demás, aprendiendo a su vez a modificar tu actitud en cuanto a paciencia se refiere en el momento del aprendizaje de dicha persona. Debes enseñarle también a que disfrute ensayando, ya que si no es así, abandonará la disciplina de manera casi inmediata. En definitiva, romperás la ilusión que tenía por la magia y se sentirá mal emocionalmente. Puede que incluso al terminar el cursillo, no quiera saber nada de este mundo y aquí no hay diferencias, quien pierde es la magia por encima de todas las demás cosas.
FRASE DEL MES: " Cuando ves actuar a un mago y no te gusta, no es que no quieras ver más a ese mago. El problema es que esa persona no querrá ver más magia en su vida".
Hasta el próximo mes amig@s...
Sinceramente,
F. Amílcar Riega i Bello.
